La ley 11/2018 señala que el estado de información no financiera incluirá información significativa (más de 80 indicadores) sobre las siguientes cuestiones:
a) Una descripción del modelo de negocio del grupo, que incluirá su entorno empresarial, su organización y estructura.
b) Una descripción de las políticas que aplica el grupo respecto a dichas cuestiones.
c) Los resultados de esas políticas, debiendo incluir indicadores clave de resultados no financieros que permitan el seguimiento y evaluación de los progresos y que favorezcan la comparabilidad.
d) Los principales riesgos relacionados con esas cuestiones vinculados a las actividades del grupo.
e) Indicadores clave de resultados no financieros que sean pertinentes respecto a la actividad empresarial concreta, y que cumplan con los criterios de comparabilidad, materialidad, relevancia y fiabilidad
- Información sobre cuestiones medioambientales: Contaminación, economía circular y prevención y gestión de residuos; Uso sostenible de los recursos y de energías renovables; Cambio climático y Protección de la biodiversidad.
- Información sobre cuestiones sociales y relativas al personal: creación de de empleo; Organización del trabajo; Salud y seguridad; Relaciones sociales y organización del diálogo social; Formación; Accesibilidad e Igualdad.
- Información sobre el respeto de los derechos humanos:
- Información relativa a la lucha contra la corrupción y el soborno.
- Información sobre la sociedad: Compromisos de la empresa con el desarrollo sostenible; Subcontratación y proveedores; Consumidores; Información fiscal: los beneficios obtenidos país por país; los impuestos sobre beneficios pagados y las subvenciones públicas recibidas.
Existen diversas formas de elaborar este EINF y cumplir la Ley. Uno de los estándares existentes, es el de la Global Reporting Initiative, GRI, que permite a las empresas satisfacer las necesidades de los clientes más exigentes.
La Ley española 11/2018 del 28 de diciembre señala este estándar como uno de los modelos a seguir.
